Nuestro mundo no está en venta
Por Jean Cushman
Activistas y sindicalistas locales organizadas por una coalición amplia tuvieron hoy una conferencia de prensa en el Monumento de Washington en el centro de Baltimore para decir: “Para el Acuerdo de Libre Comercio de Las Américas (ALCA)”.
(Traducción por Abigail Anzalone)
Baltimore, MD (11/1/03)—Activistas y sindicalistas locales organizadas por el Coalición de Baltimore en contra el ALCA tuvieron una conferencia de prensa en el Monumento de Washington en el centro de Baltimore para decir, “Para el Acuerdo de Libre Comercio de Las Américas (ALCA)”. Después de la conferencia de prensa, los miembros de los grupos se dispersaron a los mercados de la ciudad y en Sparrows Point para alentar a la gente a firmar peticiones en contra de ALCA. Estos documentos serán presentados en las reuniones ministeriales de comercio este mes en Miami, Florida.
Hubo una gran asistencia de obreros siderúrgicos locales que han estado golpeados por los cambios en la industria a lo largo de las tres últimas décadas. El mensaje de la coalición denunciaba los efectos de la liberalización de comercio “libre” traído por El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TCLAN), y que serán extendidas por el ALCA. Estos acuerdos formalizan el control de empresas sobre las leyes de la industria. Según El Instituto de Política Económica, 766.030 trabajos y oportunidades de trabajar han estado perdidos en los Estados Unidos desde que el TCLAN fue introducido en 1994.
Oradores oficiales evitaban el esquema nacionalista de dar la culpa a países tercermundistas por la desaparición de trabajos, para mostrar que el comercio “libre” daña a los trabajadores del tercer mundo tanto como hace daño a los trabajadores de los Estados Unidos.
John Hough, Vicepresidente del Sindicato United Steelworkers Local 9477, leyó una declaración de Ernie Greco, presidente del AFL-CIO. Dijo que “el acero estadounidense no puede ser competitivo con el ACLA, y que el acuerdo comportará la pérdida de trabajos industriales con buenos sueldos.”
El comercio libre llega a casa
Muchos de los obreros siderúrgicos y oficiales de los sindicatos citaban los efectos locales de los acuerdos de comercio como razones por las cuales luchar contra el ACLA. La disminución continua de obreros siderúrgicos en la fábrica de acero de Bethlehem Steel en Sparrow’s Point ha sido una de las más afectadas por los acuerdos en Baltimore. En los 1970s empleaba 35.000 personas. Recientemente, la fábrica ha sido comprada por el gigante del acero ISG, y ahora solo quedan 2.000 empleados que están luchando por sus trabajos, mientras tanto la compañía informa que las ganancias no son suficientes para continuar produciendo el acero en Baltimore.
Como una parte de la venta al ISG, las pensiones de los trabajadores y las pensiones de jubilación se han cortado porqué la compañía Bethlehem Steel está en quiebra. Un trabajador jubilado, Kenneth Carroll, habló acerca de su pensión.
Carroll trabajó en Bethlehem Steel muchos años, trabajando sobretiempo para ganar más dinero para su pensión. Su sueldo mensual bajó a $560 y perdió su seguro médico. Habló del sacrificio de trabajar en una industria peligrosa durante muchos años —un trabajo que “construyó América”— y de como se siente afortunado en comparación con los otros jubilados. “Tengo buena salud”. La esposa de Carroll murió hace años; ahora él no tiene que sostener a otra persona con sus ingresos. Sin embargo, conoce a una mujer con cuatro hijos que antes recibía las pensiones de su esposo. Ahora, solo reciben $100 al mes.
Trabajos y beneficios perdidos no solo en la industria del acero
Buenos trabajos con buenos sueldos, como el trabajo de la industria del acero, salen del país a otros países donde los trabajadores ganan mucho menos dinero. Pero no son los únicos que sienten los efectos. Según Jim Strong, el director sub-regiónal de los United Steelworkers of America, incluso los fabricantes de caramelos cambian la localización de su producción, por ejemplo: la fábrica de Nestle’s en Fulton, Nueva York, se va a trasladar a América Latina. La fábrica suspenderá temporalmente a 470 trabajadores. El efecto se intensifica; la pérdida de trabajos industriales crece mientras los proveedores pierden negocio y ponen en suspensión temporal también a trabajadores.
Además, Strong echó la culpa a la Administración de Bush por su pedido de $87 billones por la ocupación militar y la reconstrucción de Iraq. Señaló que “$800 millones se destinarán a proveer asistencia médica gratis a los iraquís. Pero no podemos proveer asistencia médica para los 46 millones de americanos que no tienen seguro médico.”
Organización en Maryland en contra el ACLA
Varias personas hablaban de los esfuerzos de gente para organizarse alrededor de este tema. Antonio Hayes, hablando por Shiela Dixon presidente del ayuntamiento, dijo que Dixon va a introducir legislación en el ayuntamiento en contra del ACLA.
Ryan Harvey, de No FTAA Towson, habló sobre la necesidad de la gente de clase media de estar mejor informada. “Me duele comprar cosas que hacen daño a la gente que las fabrica. Si la gente comprendiera que lo que compra sale de una fábrica donde se explota a los trabajadores, se opondrían.” Ryan y otros miembros de No FTAA iban a actuar en la calle cerca del Lexington Market para llamar más la atención sobre el tema.
La Delegada del Estado Salima Marriott dijo que le gustaría ver cada miembro del ayuntamiento buscando más resoluciones en contra del ACLA. “Las problemas del comercio libre son mucho mayores que los beneficios. Hemos perdido 2 millones de trabajos industriales en este país.”
No FTAA Towson, el Steelworker’s Union, Coalition Against Global Exploitation, y otros grupos se están organizando para manifestarse durante las reuniones del ACLA en Miami del 19 al 21 de noviembre.
¿Qué es la alternativa?
Varios oradores recomendaban el “comercio justo” en vez del “comercio libre”. El concepto de “comercio justo” se desarrolló en los 1970s, y tiene defensores en todo el mundo, también hay negocios basados en las ideas del comercio justo. La idea del comercio justo significa: salarios dignos, el fomento de sindicatos, normas por el mantenimiento de un medio ambiente sostenible, y el fin del trabajo infantil.
Si las cosas siguen como están, la brecha entre los pobres y los ricos del mundo será cada vez mayor, y mientras ocurre esto, la volatilidad del mundo se intensificará. Si no hay normas y regulaciones, las compañías van a destruir el planeta. Como compañías ganan más poder sobre estados y naciones, los derechos democráticos de la gente disminuirán aún más. Pagar un precio justo por productos y servicios parece ser un esfuerzo pequeño por la justicia y la paz mundial.
Para más información acera del ACLA y de organizaciones en Baltimore y Miami, ve al sitio de web de la Coalition Against Global Exploitation: http: //www.baltimorecage.org/
Los patrocinadores del evento del 1 de noviembre incluyó- MD-DC AFL-CIO, Metro Baltimore Labor Council AFL-CIO, UAW Region 8, USWA District 8, Steelworkers Organization of Active Retirees, Coalition Against Global Exploitation, No FTAA Towson, NAACP-Baltimore, Lonnie Vick (Business agent IAM Lodge 4, UNITE! Mid-Atlantic Region, Reverend Vernon Dobson (Union Baptist Church), CWA District 2, Catholic Labor Support Committee (Father Joe Muth), SLAC-JHU, SWAT-Towson, GROWL-Goucher, A. Philip Randolph Institute, Coalition of Black Trade Unionists, Reverend John H. Davis-El (Chair Religion-Labor Committee AFL-CIO), Reverend Iris Farabee-Lewis (President Clergy United for Revitalization of East Baltimore), Sierra Club.
Consulta también Public Citizen’s Global Trade Watch por un análisis detallado del Acuerdo de Libre Comercio de Las Américas,
www.publiccitizen.org/trade/ftaa/