¿Qué ha motivado a ANAIRC a impulsar una campaña de desprestigio en contra Nicaragua Sugar Estates Limited, que la ha llevado incluso a promover un boicot contra Flor de Caña y el Grupo Pellas en general? ¿Cuál es la verdadera situación de Insuficiencia Renal Crónica en Nicaragua?
El problema de ANAIRC es que no ha podido sustentar ninguna de sus acusaciones en contra de Nicaragua Sugar Estates Limited (NSEL), empresa propietaria del Ingenio San Antonio, miembro del Grupo Pellas, de la que pretende obtener compensaciones monetarias.
Si ANAIRC hubiese presentado evidencias científicas que confirmaran sus decires, es muy probable que una empresa como Nicaragua Sugar, que se distingue por ser socialmente responsable, ya hubiera acogido sus planteamientos.
Por ejemplo, ANAIRC acusa a Nicaragua Sugar de hacer un uso indiscriminado de pesticidas y alega que esta es la causa de la Insuficiencia Renal Crónica (IRC) que padecen sus miembros, cuando es bien sabido que en el Ingenio San Antonio no se aplican pesticidas sino que se implementa desde hace mucho tiempo el control biológico y mecánico de plagas y los agroquímicos que utiliza además de ser aprobados por las instancias correspondientes de Nicaragua, Ministerio de Salud, del Medioambiente, están registrados en la Agencia Ambiental de Estados Unidos (EPA) que los aprueba para su uso en la producción de caña de azúcar.
Otro ejemplo: no se sabe de donde ANAIRC ha sacado las cifras de fallecidos y afectados de IRC de las que habla; esos datos no son respaldados por ninguna institución pública ni privada en Nicaragua.
Por estas razones es que todas las organizaciones sindicales de Nicaragua, sean de izquierda o de derecha, han rechazado la campaña de desprestigio en contra de NSEL que impulsa ANAIRC.
En cambio ASOCHIVIDA, la principal organización de enfermos renales y la más representativa de Nicaragua, mantiene un diálogo con ONGs y con la empresa misma para buscar soluciones a la enfermedad de IRC que es un problema de salud pública que se presenta en toda la región occidental de Nicaragua y no solamente en los territorios azucareros.
En este sentido, ASOCHIVIDA ha acordado con Nicaragua Sugar bajo los auspicios del Ombudsman del Banco Mundial la contratación de la prestigiosa Universidad de Boston para que haga un estudio que determine las causalidades de la IRC en la zona. Hasta hoy la Universidad de Boston ha dicho que estudios previos acerca de este tema han producido un amplio rango de causas hipotéticas, pero nada definitivo.
El equipo investigativo de la Universidad ha determinado (también a partir de esos estudios previos) que los trabajadores de caña de azúcar son uno de los grupos ocupacionales con mayor incidencia de enfermedad renal crónica en Nicaragua, pero que no son los únicos.
Asimismo ha expresado que la enfermedad renal crónica se presenta como un problema complejo y multifacético y que pretenden llevar a cabo una estrategia ambiciosa para realizar estudios adicionales en el país. Sin embargo han advertido que no pueden garantizar que sus investigaciones van a encontrar una causa única y explícita que detenga esta epidemia.
En su campaña en contra de Nicaragua Sugar, voceros de ANAIRC han llegado a afirmar que las condiciones de trabajo en el Ingenio San Antonio son de esclavitud. De nuevo este es otro ejemplo de porqué ANAIRC no es tomada en serio.
Quien conoce un poco de la realidad empresarial nicaragüense sabe que el Ingenio San Antonio es una empresa modelo por sus prácticas de Responsabilidad Social, sean estas ambientales, con sus colaboradores o con la comunidad.
Algunas precisiones: En el Ingenio San Antonio se suscriben cada 2 años convenios colectivos entre la empresa y todas las organizaciones sindicales que tienen presencia ahí. Hay que resaltar que son cinco sindicatos de todas las tendencias ideológicas, desde Sandinistas (izquierda) hasta de derecha.
En estos convenios se plasman un conjunto de beneficios para los trabajadores que van más allá de lo que establece la legislación laboral de Nicaragua: 14avo mes de salario, educación preescolar, primaria y secundaria gratuita para los hijos de los trabajadores, atención médica gratuita en el mejor hospital de la zona que está al interior de la empresa misma, 60% de la canasta básica gratuita, becas, capacitaciones, seguro de vida, bonos al desempeño, transporte, almuerzo, bolis hidratantes y galletas nutritivas para los cortadores de caña, etc. Los jubilados además de recibir un complemento a su jubilación, reciben atención médica gratuita y raciones alimenticias.
Por otra parte ANAIRC y sus allegados han cometido otro error promoviendo un boicot a Flor de Caña, ron insignia de Compañía Licorera de Nicaragua (CLNSA), empresa del Grupo Pellas.
Ni Flor de Caña ni CLNSA tienen que ver con esta disputa ni son señalados por los demandantes de tener responsabilidad alguna con sus problemas, ya que los supuestos afectados no son ex trabajadores suyos sino que dicen ser ex trabajadores del Ingenio San Antonio.
Involucrando a Flor de Caña los demandantes pretenden tener un importante instrumento de presión con la expectativa de que por temor a que se afecte el prestigio de la marca, el Grupo Pellas y NSEL van a ceder y a satisfacer sus demandas de indemnización.
Decíamos que este ha sido otro error porque la campaña de boicot ha sido un total fracaso y más bien le ha generado a sus promotores mucho rechazo de parte de todos los sectores en Nicaragua.
Hay que tener en cuenta que Flor de Caña, el ron más premiado del mundo, es una especie de embajador de la identidad cultural nicaragüense y un orgullo para este país.
Ojalá que ANAIRC reflexione y acepte los llamados a la sensatez que se le han hecho y que tomando el ejemplo de ASOCHIVIDA contribuya con los sindicatos, los empresarios, las autoridades y la sociedad civil a buscar las causas de la enfermedad renal y ayudar a encontrar soluciones a este desafío de salud pública.
Para mayor información visite:
www.laverdadnsel.com
www.nicaraguasugar.com
www.youtube.com/grupopellas
boicotflordecana.wordpress.com/