Un anónimo que se presenta como víctima de Pinochet explica a la señora Maigret que los efectos corrosivos de la conspiración mediática en los conceptos de Estado Nación, de ciudadano y de organismo multilateral es muy explícita en la mediatización aplicada a la muerte del dictador. Los rasgos de esta manipulación pueden resultar muy útiles, según el remitente, para avanzar en las recomendaciones realizadas por los autores de las últimas cartas dirigidas a la destinataria de la actual carta.
Querida señora Maigret; últimamente usted ha sufrido el acoso del Capitán Hastaings:
canarias.indymedia.org/newswire/display/14177/index.php, de Hercule Poirot :
www.sdimc.org/en/2006/12/123274.shtml y de las Visitadoras :
www.indybay.org/newsitems/2006/12/10/18336463.php. Me parecen muy interesantes las perspectivas y las alternativas que se le han propuesto, especialmente en lo que se refiere a la necesidad de cesar de concentrar las energías en la reiteración de síntomas de conspiración global mediática para trastocar los conceptos de Estado Nación, de ciudadano y de instituciones multilaterales en la opinión. Creo, asimismo, como los remitentes de las cartas precedentemente citadas, que antes de abandonar el interés por los síntomas, tenemos que detectar rasgos explícitos de los mismos. Así, hace algún tiempo, usted indicaba en su carta a Hercule Poirot:
www.lainsignia.org/2005/noviembre/int_028.htm que sus sufrimientos de pobre en la II Guerra Mundial, debían ser contemplados al mismo título que las persecuciones raciales de la no pobre Simonne Veil. Es obvio que el sufrimiento de los pobres fue grande , durante la II Guerra Mundial, pero, al margen de la clase social de la víctima, los efectos de la tortura, el exterminio o la degradación, por xenofobia o por simple uso del poder, son inadmisibles. La Ser, ayer lunes y hoy martes, respectivamente 11 y 12 de diciembre presenta dos versiones sobre la muerte de Pinochet: la del horror de una de las dictaduras más crueles y la del destino de “salvador” del desastre económico al que había llegado el gobierno utópico de Allende. Yo soy víctima de Allende y me preocupan la difusión de la última y la forma en que ésta se presenta siempre: los indicadores económicos, como indican las visitadoras, se utilizan como imperativos categóricos. No hay discusión, sino balances y auditorias predeterminados como dogmas de fe. Los remitentes de las cartas precedentes han mencionado estos recursos en las estrategias de la actualidad. Lo que debiera preocuparnos no es tanto el síntoma como la carencia que conduce al mismo. Los mensajes de Allende no solamente han sido manipulados, sino que éstos han sido mutilados: el gobierno Allende representa mucho para muchos; chilenos o no chilenos. Me gustaría conocer la opinión sobre el tema de Régis Debray, que también ha sido un destinatario de la carta que usted escribió a Poirot, ya citada. Nuestro Allende no puede ser reducido a las constantes convencionales de la economía chilena. Me ha sorprendido vivamente la gran relevancia que ha tomado la muerte del general en la actualidad chilena. La única representante del gobierno en el funeral del dictador, la ministra de la Fuerzas Armada, ha sido insultada , golpeada y obligada a abandonar el acto. Las fuerzas del orden chileno parecen haber puesto, sin embargo, más celo, en reprimir las manifestaciones antipinochetistas. Estos incidentes, sin embargo, no han temido incidencia alguna en los artículos de apertura de la edición de noche de los medios de comunicación franceses del 12 de diciembre, pese a esta ausencia, el genocidio o el racismo son objeto de la mayoría de los artículos (6): por excesos de agentes del orden, que causan la muerte, inexplicable, de un magrebí (4) Le Monde “Disparu de Nantes : des policiers mis en garde à vue après la découverte d'un corps” [Desaparecido de Nantes: policías procesado tras el hallazgo de un cadáver] Le Figaro “Le corps de Taoufik repêché” [Se ha encontrado el cadáver de Taoufik] Yahoo Actualités “Un corps repêché dans un canal à Nantes, trois policiers aretes” [Se ha encontrado un cadáver en un canal de Nantes, tres policías detenidos] Libération: “Un corps retrouvé à Nantes, deux policiers en garde à vue” [Se ha encontrado un cadáver en Nantes, dos policías procesados] Por simple exterminio del “otro” (1): TF1 “Les deux dernières prostituées retrouvées mortes ?” [ ¿Serán las dos últimas prostitutas que se encuentren muertas?] Y por la alusión al procesamiento de un dictador, por graves delitos de genocidio, en Etiopía y a la opulencia que éste goza, intangible para la justicia del Estado que emite la condena, en Zimbabwe (1) RFI “Ethiopie Mengistu reconnu coupable de génocide” [ Etiopía Mengitusu condenado por genocidio] El artículo explica los instrumentos legales de esta impunidad: Tras doce años de un proceso complejo, el ex dictador etíope Mengistu Haïlé Mariam ha sido declarado culpable de genocidio, durante el periodo del “Terror Rojo” (1977-78) por la Alta Corte Federal de Etiopía. El procesado está amenazado por la pena de muerte, pero, desde que éste fuera despojado del poder, en 1991, aquel emigró a Zimbabwe, Estado que se niega a conceder la extradición del mismo. Como indica Carlos Ortiz de Zárate en “El discurso de la arrogancia”:
www.rebelion.org/imperio/040120ortiz.htm: El desarrollo del contencioso iraquí ha impuesto la dialéctica del ataque preventivo. La imposición se cimienta en la potencia que muestra, sin recato, una absoluta carencia de argumentación asumible en el contexto internacional. Una tan explícita carencia tiende a ser considerada como dato marginal, como si se tratara de una debilidad de la potencia Así, parece muy curiosa la gran incidencia del cadáver de Taoufik y la escasa información que parecen tener los medios impactados por el mismo: se citan, por ejemplo, diferentes cifras de agentes del orden implicados. Nuestra curiosidad puede aumentar, si consideramos el impacto que tienen, en el contexto del funeral del general Pinochet, violaciones manifiestas de la Proclamación Universal de Derechos humanos y especialmente de exterminio del otro o impunidad que gozan los culpables de estos delitos. Curiosamente, el asunto Pinochet, incluyó una escenografía de deficiencias democráticas en la aplicación internacional del Derecho y como en el caso del ex dictador etiope, se ofrecen signos de opulencia de los condenados, pero impunes. En España, donde resido actualmente, yo no tuve tantas facilidades legales para instalarme , pese a correr el riesgo de exterminio en el régimen de Pinochet, como han tenido éste o el ex dictador etíope, respectivamente, para salir del Reino Unido, ante la demanda de extradición emitida por el Juez Garzón y en Zimbabwe. Tampoco tenía recursos. Los ricos dictadores tienen abogados y argumentos, las víctimas, pobres o ricas, de los mismos carecemos de abogados y de argumentos. Ahora soy español y me identifico con las víctimas del franquismo. Precisamente ahora se inicia el proceso parlamentario para la propuesta de Ley sobre la memoria histórica:
es.wikipedia.org/wiki/Ley_de_la_memoria_hist%C3%B3rica Los debates sobre este proyecto de ley pueden, obviamente, ser presentados al modo del discurso, expuesto previamente, de Wikimedia. También podrían aplicarse los planteamientos que yo he expuesto previamente. Como los remitentes de las cartas mencionadas previamente proclamaban, los ciudadanos tenemos que defendernos frente a la desprotección proveniente de la distorsión que se está practicando, actualmente, en los conceptos de Estado Nación, de Ciudadano y de organización multilateral: Obviamente, la distorsión de estos conceptos no data de la iniciación de la batalla mediática de la Operación Libertad Duradera, a cuyos rasgos alude Carlos Ortiz de Zárate, en “El discurso de la arrogancia”, artículo ya mencionado , como muestra el mismo autor en “La ritualización en la mediatización de Le Monde”:
www.lainsignia.org/2000/noviembre/cul_066.htm. La propia ONU nació estigmatizada por el fracaso implicado en su primera misión: institucionalizar los territorios de Israel y de Palestina. Sin embargo, el impacto del discurso de la arrogancia es una realidad, tanto como que yo sigo siendo pobre, desprovisto de identidad, ya no sé si soy chileno o español y por los unos y por los otros soy tratado como “extranjero” si no como pestiferados, simplemente porque estaba en el “lado equivocado, en el de los perdedores, aunque su condición de perdedores hubiera sido orquestado por la colaboración multilateral, por los malos resultados en las constantes convencionales de mercado, de un régimen acosado por una conspiración multilateral. Yo no he bailado ni tomado champán para celebrar la muerte de Pinochet ; me he sentido muy triste, por el contrario, ante la mediatización y el espectáculo del óbito, de lo mucho que se ha escuchado el homenaje al hacedor del Chile contemporáneo, por su propia hija, la agresión verbal y física sufrida por la representante de la República y la huída de ésta. Se ha escuchado demasiado a los pinochetistas y a los analistas del liberalismo. Somos sin embargo, muchas más las víctimas que nos mantenemos en silencio ante un hecho que consideramos intrascendente, como la muerte del ex-dictador, que no cambia, para nada, los traumas expuestos. En todo caso, pelitos a la mar, lo pasado es irrecuperable, pero el presente y el futuro lo es. Dentro de mi desgracia, considero un privilegio la apertura al otro implicada en mi vivencia y el mestizaje que se ha producido en mi identidad. Estas circunstancias nos hace más aptos para captar más cómplices y para identificar objetivos comunes. Creo que mis predecesores epistolares han hecho propuestas altamente aconsejables, pero me gustaría añadir algunas sugerencias: Las víctimas no deben plantear venganza, sino justicia y no deben estancarse en el delito, sino en la privatización de derechos humanos de la que han sido objeto: la ausencia de institucionalización para los palestinos, las manipulaciones de los derechos de asilo, la exterminación, las diversas exclusiones, la conspiración mediática, la destrucción del planeta, la imposición del poder, la primacía de un dogma de fe de globalización financiera… Las víctimas somos cada vez más numerosas y los verdugos cada vez más poderosos. Tendremos que concentrar nuestras energías en desactivar parcelas de ese poder y para definir éstas, tendremos que proceder a una evaluación de nuestros recursos.