Hercule Poirot descubre que el “médium” , en este caso la señora Maigret, no ofrece solamente el soporte del descubrimiento del crimen, que es, en suma, el descubrimiento del autor del mismo, sino que conduce al planteamiento del acto criminal, en este caso, la conspiración mediática; la ya tan mencionada y anunciada “batalla mediática” de la operación Libertad Duradera. En esta carta, el detective sugiere que es necesario, ahora, avanzar en la terapia.
Chére Madame; pensaba, hasta el momento, que su método no era sino una “boutade” o en el mejor de los casos, la previsión del “topismo” , con que me obsequió, tan generosamente, el capitán Hastings. Tanto el último, como usted misma, saben que no añado ningún prejuicio a ese papel de “soporte” que se les atribuye a usted, al capitán Hastings, a Watson..,. en la resolución del enigma. Holmes, yo mismo, el comisario Maigret, la señorita Marple, el detective Pepe Carvalho y tantos otros, resolvemos los casos a través de este soporte. Sin soporte no habría resolución de caso.
Además, como ocurre en la carta que ha dirigido a usted, recientemente, el capitán Hastings, me parece que inician un proceso de resolución sobre el planteamiento, sobre la sordidez de los rasgos de los efectos de la conspiración de los medios de comunicación más representativos de la opinión francesa para trastocar los conceptos de Estado Nación y de ciudadano, en la actualidad. También me parece que todos ustedes, incluido el señor Watson, considerarían elemental, además, explicar los objetivos de esa conspiración; ¿A quién benefician y cómo lo hacen, los efectos de la misma?.
Es posible que algunos de los nombres indicados, incluido el mío, por mucho que me pese reconocerlo, sean desconocidos para ciertos lectores. John H. Watson:
es.wikipedia.org/wiki/John_H._Watson me parece expresar el prototipo del “médium” al que me refiero en este artículo y creo que la lectura de la carta que dirigía a usted, recientemente, el capitán Hastings :
barcelona.indymedia.org/newswire/display/283239/index.php presenta bien el objeto que me propongo plantear.
En un artículo que he leído recientemente, usted no se contenta con ofrecer al comisario Maigret, un soporte para la resolución de un caso, sino que su propia abnegación logra construir este soporte a través del rito sacrifical: gracias a que usted es ingresada en urgencias por intoxicación , por la ingesta de una comida que usted ha compartido con el comisario, éste logra encontrar al autor de un crimen que ha sido cometido en la misma sala para enfermos graves en la que atienden a usted:
lavozdecristian.blogcindario.com/2006/05/00042-las-vacaciones-de-maigret.html
Creo que los ingredientes de esta historia: vacaciones de ustedes dos, degustación compartida de manjares y la grave amenaza de muerte que pesa sobre usted, crean el climax y el desenlace, en la existencia de otro paciente, que en circunstancias como la suya propia habría sobrevivido.
De la misma manera, el capitán Hastings, teje un soporte rígido, para mostrar que, en efecto, el método de la señora Maigret, muestra a la saciedad, la constancia tenaz de signos de deterioro de los conceptos de Estado Nación y de Ciudadano, en el discurso de la actualidad, en todo el planeta. Sin embargo, señala el emisor, el impacto del grupo de la señora Maigret es nulo y estéril, puesto que la intensidad de la conspiración objeto de la denuncia, continúa siendo una constante. Los datos de la última en la actualidad de la carta del capitán Hastings no solamente corroboran las conclusiones logradas en el grupo de debate:
www.webs.ulpgc.es/agora/comAsig1.htm y las carencias que usted denuncia en el mismo, sino que facilitan el acceso a perspectivas que permiten respuestas más acertadas a preguntas formuladas por el capitán Hastings en la carta ya aludida.
La lectura de la última me ha hecho comprender, Chère Madame, que su método, lejos de ser una “boutade” o un simple “médium” de la cotidianidad, conduce a perspectivas muy adecuadas para percibir alternativas. Es un hecho que para hacerlo, como es aparente en los modelos de “médium” mencionados, podemos recurrir al ritual sacrifical de usted misma, señora, en el relato de las vacaciones que usted compartió con su marido, mencionado previamente.
Así, como lo hacía el capitán Hastings, empezaré por mostrar que, como indica aquél en su momento, el discurso de la actualidad de los 4 y 6 de diciembre, fechas en que escribo esta carta, está plagado de signos distorsionantes de los conceptos de Estado Nación y de ciudadanía. En mi argumentación me limitaré a indicar que las aperturas de portada de los cuatro medios de comunicación más representativos de la opinión francesa, en ambas fechas, contienen un alto grado de signos corrosivos para los dos conceptos que consideramos objeto de la conspiración denunciada. . Añadiré que me parece observar un “crescendo” en las dos fechas, en cuya identificación de rasgos me propongo avanzar. Finalmente, propongo perspectivas para identificar a los “beneficiarios” y para estimar el funcionamiento de los beneficios de estos.
Hay explícitos rasgos de una ruptura, cada vez más desgarrada entre las ocurrencias del 4 y del 6 de diciembre y los modelos de los objetos de nuestro debate: la conspiración mediática es manifiesta en todos los titulares seleccionados:
El 4, Le Monde ofrece un inquietante síntoma de degradación: “Les Français et les Américains inquiets d'une libéralisation accrue du commerce mondial” [Franceses y americanos inquietos ante un comercio cada vez más abierto]. Nada, hasta el momento nos permitía prever que Francia y USA podrían coincidir en los planteamientos y en los sentimientos sobre el liberalismo. Obviamente hay convergencias en la materia, por ejemplo entre Chirac y Bush, pero los medios de comunicación han centrado mucho más su atención en las divergencias de ambos , como es el caso, por ejemplo, con respecto a Irak. ¿No es altamente inquietante que se nos muestre, tan abiertamente, que las políticas de Bush y de Chirac coincidan en materias como el imperio de la “apertura” de mercados·.
El 6, el vespertino nos confronta con una mucho mayor degradación de la actualidad;
“L'action d'EDF s'envole, portant la capitalisation du groupe à 100 milliards d'euros” [Las acciones de la Compañia de Gas y de electricidad francesas (EDF) por las nubes. La capitalización del grupo sube más de 100 millardos de euros.]. La noticia no tendría un gran interés en el propio artículo, excepto por el hecho que se justifican los efectos expuestos por la proclamación del gobierno de su intención de disminuir las presiones para el mantenimiento de los precios en un sector que estaría obligado, por la legislación actual, a vender a precios inferiores al costro de producción. Claro que cuando observamos operaciones similares, en el mismo sector, en otros países, como es el caso, en la UE, actualmente con las confrontaciones que se producen entre Alemania, Francia, España… por imposición de restricciones de los Estados miembros de la UE, en la materia – casos EON, Endesa, Gas Natural, Iberdrola….-. En todos los casos mencionados, además, se han producido todos los síntomas expuestos en la actualidad francesa y alguno más, como ocurre en España con el desembarco de constructoras en el sector eléctrico. La Subida de precios de energía eléctrica en los Estados miembros de la U.E., implica la subida de cotización de las acciones de las empresas del sector en las Bolsas del territorio y por tanto el impacto financiero de las mismas. Si a este dato añadimos el del traspaso del capital del sector de la construcción, hasta ahora locomotora del crecimiento español, a la incipiente especulación bursátil en productos energéticos y al de las amenazas que franceses y estadunidienses verían en la fiebre aperturista de mercados, concluiremos que el segundo artículo representa peores perspectivas que las que hubiéramos podido prever el 4.
Los grados de inquietud que inspiran los artículos de apertura de las mismas fechas de Le Figaro, presentan otras escenas, pero ambas coinciden en la expresión de amenazas contra los conceptos de Estado Nación y de ciudadano y en la realización de la perspectiva más nefasta de los escenarios que amenazaban en la fecha precedente.
El 4 , como le Monde, el diario conservador evoca una crisis en la diplomacia internacional: “Affaire Litvinenko : les relations entre Moscou et Londres prennent "un coup"” [Escándalo Livinenko: grave crisis en las relaciones entre Moscú y Londres]
Se trata de otro altercado que afecta gravemente a los conceptos de Estado Nación y de ciudadano y de la Unión Europea:
Sergeï Lavroy, jefe de la diplomacia rusa considera inaceptable la campaña de intoxicación que pretende implicar a las autoridades rusas en la muerte del ex agente de las misma. Dos agentes británicos se dirigen, en este momento, a Moscú, al objeto de interrogar a testigos de la nuerte. Asimismo, el ministro de Interior británico, se dispone a informar a sus homólogos de la UE sobre el desenlace del escándalo.
El 6, el portavoz mediático de la mayoría presidencial y parlamentaria francesa no aumenta como el medio anterior la intensidad de la amenaza, ya suficientemente explícita en el párrafo precedente, pero si presenta otro panorama de inquietud:
“La Commission Baker sort son plan pour l'Irak” [La Comisión Baker hace público su plan para Irak]
El titular no hace mención a amenazas, pero el cuerpo del artículo presenta explícitos signos de descomposición de los conceptos que los participantes en este debate consideramos amenazados por la conspiración mediática:
La Comisión Baker se propone recomendar un abandono progresivo de las quince brigadas de combate USA que se encuentran en territorio iraquí. Esta recomendación no irá acompañada de calendario alguno, pero la misma se basa en la consideración que el anuncio de esta retirada podría lograr avances en la toma de decisiones por parte de las autoridades iraquíes.
No creo necesario insistir sobre la resignación implicada en esta proclamación; me parece, sin embargo, que debemos evaluar los efectos de la renuncia a perspectivas tan importantes como el contexto. En efecto, el conflicto Iraquí ha impactado intensamente la actualidad de los últimos años, lo que Carlos Ortiz de Zárate llama “Discurso de la arrogancia”:
www.rebelion.org/imperio/040120ortiz.htm
Libération utiliza matices más coloreados y contrastados: el 4: el titular “Trois grammes de cocaïne et 210 euros de bénef” [Por la venta de tres gramos de cocaína, 210 euros de beneficio”, tiene efectos corrosivos para quienes alcanzan sueldos mensuales en los entornos de 1000 euros, la mayoría de los jóvenes, especialmente en el barrio referente del artículo:
En Seine-Saint-Denis, en un lugar cercano a Bobigny. Estamos siguiendo a un cocainómano que recurre a la reventa. Éste se dispone a comprar cocaína para uno de sus clientes de París. “Aquí está más barata , hay menos vigilancia y se encuentra en abundancia, explica nuestro guía. Éste se dispone a comprar 3 gramos de cocaína, se trata de un encargo. ¿Los beneficios que piensa obtener? “Yo gano 70 euros por gramo.
Para los participantes en esta tertulia no resulta difícil reconocer el entorno; núcleo duro de los barrios periféricos parisiense, en los que el ministro del Interior ha alimentado y confrontado rebeliones. No es, asimismo, difícil, relacionar esta escena con las de la comisión Baker recientemente citada. Por si lo expuesto fuera poco, el número del 6 del mismo medio, incide en estas relaciones: “Justice. Sarkozy n'est pas en sécurité” [Justicia. Sarkozy no está en seguridad]; porque, como ocurre con el plan Baker :
El proyecto de ley para reducir la delincuencia, aprobado ayer en la Asamblea Nacional, es el 10º texto aprobado y propuesto por la derecha, que proclama los mismos objetivos, desde 2002, sin olvidar las dos leyes sobre la emigración, que invocaban, asimismo, estos objetivos. El texto actual, que tiende a ser considerado como la obra maestra del mandato de Nicolas Sarkozy y el pilar de la campaña presidencial de éste, aumenta el poder de los alcaldes y endurece las sanciones contra los delincuentes menores de edad y contra la reincidencia. Este texto prevé, asimismo, sanciones aplicables desde los 10 años de edad y la detención provisional desde los 13. Esta ley no ha logrado un gran apoyo en el hemiciclo y hace pensar que los diputados de la Unión por la Mayoría Popular (UMP) comenzaran a sentirse agobiados por esta avalancha legislativa.
TF1 ofrece aún mayores avances en la ritualidad:
4)
“L'affaire Litvinenko tourne à l'imbroglio diplomatique” [El escándalo Litvinenk podría provocar embrollos diplomáticos”
6)
“Le mystère des feux de granges en série résolu ?” [¿Se puede considerar resuelto el misterio de los incendios, en serie, de las granjas?
Lo expuesto, como indicaba el capitán Hastings, prueba la constancia y el impacto del deterioro de los conceptos objeto de nuestra anti-conspiración. ¿Quiénes son los beneficiarios del deterioro expuesto?. Por lo pronto, podemos comprobar que los efectos de la conspiración expuesta provocan resultados electorales o expectativas de voto que producen modelos incompatibles con los modelos convencionales de gobierno: así, el terremoto político del 21 de abril de 2002, produce la confrontación, en la segunda vuelta presidencial del candidato de la extrema derecha Lepen y de Jacques Chirac, pese a que la suma de los votos de ambos era menos representativa del electorado francés que la suma de los votos obtenida por los candidatos eliminados en la primera vuelta de las mismas elecciones. El nacimiento de la actual mayoría presidencial y parlamentaria representa, ante todo, un frente anti fascista. Sin embargo, las mayorías obtenidas por estos procesos, resultan más plebiscitarias y típicas de regímenes dudosamente democráticos, como el bonapartismo – Luis Napoleón Bonaparte fue menos plebiscitado que Chirac, pero aquél proclamó el II Imperio (1852-1870). Por el otro lado, la excesiva polarización de la UMP produce fisuras tan confrontadas como la confrontación existente actualmente entre Chirac y Villepin, por una parte y Sarkozy por la otra o dicho de otra manera, entre el presidente de la Republica y el presidente del partido del poder o entre el jefe de gobierno y el ministro del Interior.
Este panorama no es específico a Francia, como tampoco la conspiración enunciada es exclusiva a este país. La derecha española no está menos dividida que la francesa, como indicaba muy acertadamente, el capitán Hastings y como podemos comprobar en las constantes confrontaciones que se producen entre la presidenta de la Comunidad Autónoma y el alcalde de Madrid, ambos del Partido Popular.
Es un hecho que podemos observar características similares en las izquierdas como indicaba usted misma en su carta a Pepe Montilla:
baltimore.indymedia.org/newswire/display/14001/index.php , que, casualmente, provocó la última carta del capitán Hastings.
Es asimismo, un hecho que tanto los partidos de gobierno como de oposición de los dos territorios mencionados, participan en las degradaciones mencionadas y que obtienen, así, unos resultados concretos.
Solamente hay dos alternativas para explicar la globalización de los rasgos expuestos: sea estos favorecen a los partidos implicados o sea aquellos serian globalizados por un virus altamente infeccioso. Puesto que el último supuesto parece poco probable, tenemos que aceptar el hecho que el acontecer está predeterminado por estrategias que producen diferentes efectos políticos: afirmación de los extremos de las derecha y la izquierda; polarización de los votos en los grandes partidos, de gobierno y de oposición e incluso gobiernos compartidos por los partidos de gobierno y de oposición, como ocurre en Alemania y como tiende a reflejarse en otras elecciones o previsiones electorales.
Este último caso resulta tan aberrante al sistema democrático convencional como su contrario, el plebiscito, como ocurre actualmente, con Chirac o con las mayorías absolutísimas de Felipe, de Aznar, de Chirac, de Hugo Chaves. Por extraño que parezca, estamos en una época en las que se producen plebiscitos o mayorías muy ajustadas que imponen coaliciones de las mayorías del gobierno y de la oposición y en el fondo representan una coalición plebiscitaria. En todo caso, los resultados conducen a un modelo de gobierno que no es compatible con el concepto convencional de democracia.
Me falta, obviamente, sugerir alternativas. Podría resumir mi sugerencia en invitar al grupo a concentrar nuestros esfuerzos en reclamar la pervivencia de los conceptos convencionales de Estado Nación, de ciudadano y de organizaciones multilaterales, porque la amenaza de la conspiración es tan explícita como los efectos de la misma: los ciudadanos estamos cada vez más desprotegidos, sin los referentes de los conceptos mencionados, que nos permitían identificar nuestro espacio.
Nuestra privación es consentida, hasta el punto que nos instalamos, cómodamente, en la “poltrona”, tras haber sido desposeído de referentes y tras haber aceptado un discurso de la arrogancia y el imperio del mismo.